Llegué de trabajar cansada pero con energía y ganas suficientes para jugar con mis hijos, que me reciben eufóricos cada tarde. Paz quiere la teta, abrazos y besos, y Manu prefiere esconderse y sorprenderme, y jugar al fútbol...
Accedí, como es costumbre. Pero le pedí a Manu unos minutos para cambiarme de ropa y ponerme el tan placentero pijama. Me respondió:
_ No mamá! Yo quiero verte linda, como cuando te vas a trabajar!
4 comentarios:
¡¡¡DIVINO TOTAL, GENIAL, AMOROSO, SENSIBLE!!! qué lindo Mai, te felicito, besi
Xime
con esos piropos tan hermosos!!!!!!!!!! Caramba es que así dan ganas de seguir!!!
A nooo que dulce!!!
Es para comerlo a besos a Manu.
beso
Ayyyy, me sentí igual!!!! yo llego a mi casa desesperada por ponerme el pijama, es sinónimo de estar en casa.
Y empiezo recibiendo a matilda, que se desespera por mis brazos y entre las dos buscamos a Joaquín, que está escondido desde que escucha el auto. Yo hago todo el circo y al menos aprovecho y me voy sacando algo, como los zapatos. Mi marido me sigue y vamos charlando algo, me va juntando las cosas.
Y bueno, cansada, no importa: es una delicia que estemos todos....
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