viernes, 15 de enero de 2010

Llamame por mi nombre



Llamame por mi nombre; antes lo hacías. No existen razones para que dejaras de hacerlo. No te pido que me llames con el diminutivo que suelen llamarme cariñosamente, como vos también lo hacías hasta hace poco tiempo. Sólo te pido que me nombres. Es lo mínimo que puedo pretender. Es lo mínimo. No pido nada más.
Me duele que no lo hagas. Me causa impotencia poder sólo en sueños decirte que me lastimaste.

Las cartas están sobre la mesa. Sólo que yo no estoy dispuesta a jugar el juego del egoísmo y del enjuiciamiento. No hay contenido en ello; hay pleno vacío.

Mi filosofía de vida me lo impide...
Let it be!


La obra es de Egon Schiele.


8 comentarios:

Poli dijo...

Nada bueno puede edificarse sobre el egoismo... tu filosofia de vida me parece mucho mejor! Te leo seguido, no sufras. Un saludo.

Maisa dijo...

Gracias Paola!

Intento mitigar el egoísmo...

Gracias por leerme, me hace bien que lo digas!

Cada vez puedo un poquito más!

Besos!!!

Ricardo Fasseri dijo...

El egoismo es el vacío más dificil de llenar. El amor se diluye en el, se muestra débil, estéril, desaparece..

Noesperesnada dijo...

Dicen que el nombre nos define, nos dá identidad, y que no no nos nombren nos niega y de alguna manera niega tambien nuestra existencia...

Maximiliano Galin dijo...

Si pretende que las cosas se llamen por su nombre, habrá que ir hasta las últimas consecuencias, Maisa, para que si el egoista la hace sufrir usted pueda sanar las heridas, y sino continuar siendo llamada por él, por su nombre. Valiente mujer!
Besos.

Jime dijo...

Besha, a veces eso se hace simplemente por ignorancia... vos sos una mujer rica, virtuosa, noble, generosa, afectuosa

no todos tienen tantas "herramientas" para vivir... no nombrarte podría ser su mecanismo de defensa, frente al desconocimiento...

quizás no deberías tomarlo como algo personal, quizás vos deberías aceptarte, aceptar tus decisiones, hacer tu nuevo camino, quizás si concentraras energías en ello llegue el día en el que no te lastime no ser nombrada

ser nombrada no siempre significa aceptación, a veces se hace porprotocolo o por lazo político

sabina borda dijo...

algo nos despierta, algo nos despavila, nos sacudimos la niebla, la lluvia la brisa, las lineas grises se desprenden de nuestras ropas, y aparecemos, alguien nos evoca, alguien nos nombra. sostiene esa vela encendida sobre nuestro rostro que empieza a cobrar forma sobre la parede oscura, desde la sombra, como si nos llamaran a la funcion de una obra humilde musical, pero con muchos aplausos y sonrisas, alguien nos nombra...

saludos, talvez abrazos.

un gran placer encontrar su blog.

Sabina.

Maisa dijo...

Gracias a todos por la empatía!

Indudablemente, que dejen de nombrarnos es la muestra más cabal de los límites de quien nos está negando...

Besos!!!